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Cómo eliminar y controlar las malas hierbas. Definición de malas hierbas o malezas. Razones de su crecimiento. Planificación a seguir.
Las malas hierbas o malezas son aquellas plantas que salen de manera imprevista en el jardín a raíz de la tierra y del terreno. Para controlarlas hay que realizar el siguiente plan:
- Identificar las malezas.
- Comprobar si afectan al jardín de césped natural.
- Gestionar adecuadamente el jardín.
- Elegir el herbicida más eficiente.
Las malezas, en general, dan una impresión de dejadez en el jardín. Además, luchan por el sol, agua y cualquier otro componente junto con otro tipo de plantas y, también, con el césped natural. Dentro de las malas hierbas, existen dos tipos como son los de hoja ancha y de hoja estrecha.
Las razones por las que crecen este tipo de plantas son:
- Por la mala calidad del terreno.
- Daños provocados por insectos, animales, etc.
- Las temperaturas extremas ya que favorece el crecimiento de las malezas
- La falta de mantenimiento como ausencia de nutrientes, falta de agua…
- Y por el pisoteo intenso en caso de que la variedad elegida no tenga esa característica.
Para evitar el crecimiento de las hierbas existen diferentes formas:
- La dosis de riego y abono debe estar relacionado con la variedad de césped elegida.
- Aplicar herbicidas.
- Plantar césped natural en rollos de tepes. Las empresas productoras de este tipo de planta ornamental realizan procedimientos exclusivos en materia de malas hierbas, hongos, enfermedades, etc., es decir, estudian cada caso de malas hierbas y lo tratan con productos exclusivos para esas hierbas.
- El terreno ha de estar formado por una buena base de mantillo, tierra vegetal y arena de río.
- La altura de corte es importante. Debe estar entorno a 3 centímetros de hoja. En verano la frecuencia de la siega debe ser prácticamente semanal.