Existen diferentes tipos de abonos para césped natural. Sin embargo, se debe elegir aquel que sea más eficaz y eficiente para el jardín. Los abonos para césped natural se dividen en abonos simples y abonos compuestos.
Uno de los pilares fundamentales para el mantenimiento del jardín es el abono para césped natural, al igual que la siega y el riego. Quizá sean los tres elementos fundamentales de jardinería. Para ello, en lo que nos respecta hoy, la nutrición del césped natural es importante porque básicamente es el único alimento que recibe la planta ornamental, sin ello el jardín no tendría los nutrientes necesarios para su supervivencia.
Abonos para césped natural:
Los abonos simples son aquellos que tienen un nutriente principal, es decir, o bien nitrógeno o fósforo o potasio. Se diferencian de los abonos compuestos porque estos últimos contienen al menos dos de los componentes citados. Ahora bien, dentro de los abonos compuestos se subdividen en abonos complejos y abonos de mezcla.
La diferencia entre ellos es que los abonos complejos son aquellos que se obtienen mediante reacción química de las materias primas que lo componen. Sin embargo, los de mezcla se obtienen sin reacción química. Otras ventajas de los abonos complejos son:
- Los nutrientes de los que están compuestos son 100% solubles y asimilables por los cultivos. Así, ofrecen una gran rentabilidad al terreno y, en consecuencia, al césped natural.
- Estos abonos reducen el coste de transporte y de las tareas debido a que cada granulado contiene al menos dos nutrientes. En otra clase de abonos cada granulado contiene sólo un componente y, por tanto, tendríamos el doble de componentes.
- De esta manera, el abono complejo facilita mejor el aprovechamiento hacia la planta y, por tanto, hacen que sea más eficiente al caerle más de un nutriente por cada gránulo.
- Permiten una distribución uniforme y evita la separación de los componentes durante la aplicación.
- El uso de este tipo de abono nos ayudaría a reducir costes, en general.
Los fertilizantes NPK de abono complejo tienen una amplia variedad. Así, existen los NPK tipo 1 en la que todos sus nutrientes son asimilables por las plantas y, por otro lado, los NPK tipo 2 donde el fósforo que contiene es insoluble. Hay que tener especial cuidado con lo que nos ofertan los fabricantes porque nos pueden ofertar descuentos en abonos complejos tipo 2 y a un precio más barato, pero realmente no contiene las mismas ventajas que las del tipo 1. Los del tipo 2 son de menor calidad y el fósforo insoluble no es asimilable por la planta. Sin embargo, las del tipo 1 la infiltración en el suelo es rápida y es asimilable por la planta de una forma completa.