El césped como elemento fundamental de nuestro jardín
El césped es la parte principal de un jardín. Es un armonioso aglutinante con un fuerte impacto visual en nuestro jardín, que te permite crear unos espacios magníficos para la colocación de flores y plantas; y proporciona espacios acogedores para el juego de los niños o el plácido descanso de los mayores.
A pesar de que el césped sea, como hemos dicho, el elemento principal de nuestro jardín, es al que menos cuidados se suele prodigar, teniendo en cuenta además las pocas atenciones que este requiere, con cortarlo habitualmente suele ser suficiente.
Tan importante es la preparación del terreno y la correcta plantación del césped, como la elección del tipo de césped adecuado al fin para el que vaya a ser destinado. Se conocen más de mil clases de césped de las cuales para la elaboración de jardines podemos destacar: mezclas de semillas de césped, como pueden ser la festuca con la poa pratensis, este tipo de césped tiene un fácil mantenimiento y proporciona una esplendida cubierta verde; el trébol blanco, es muy interesante por el hecho de no amarillear en las épocas más secas; el césped de manzanilla, con hojas aromáticas, muy aconsejado para pequeños jardines con suelo seco y arenoso; y el césped con manzanilla, favorito de los expertos el treneague, un césped que habitualmente no florece y no requiere casi corte.
Es muy importante antes de proceder a plantar césped, la preparación del terreno de nuestro jardín, para que esté en las mejores condiciones. Para que el césped crezca con la fuerza necesaria es fundamental que el terreno que se vaya a dedicar a jardín se encuentre a cielo abierto, en el peor de los casos no es conveniente que en verano tenga sombra más de medio día, aunque existen variedades de césped que soportan muy bien la sombra. La superficie que tengamos pensada dedicar a jardín es conveniente que esté nivelada y con buen drenaje. Es muy importante enriquecer el suelo del jardín, caso de que este sea pobre y tenga mucha arena, para ello aplicaremos una capa de turba o musgo de 4 ó 5 centímetros, y utilizaremos fertilizantes para que el césped se desarrolle en las mejores condiciones. Este proceso de preparación del suelo para la plantación del césped se puede hacer en cualquier época del año, teniendo la precaución de que el terreno no este embarrado o muy mojado. Hay que rastrillar la tierra profundizando unos 13 ó 15 centímetros y así eliminar los terrones.
Después de todo el proceso anterior hay que empezar a sembrar el césped, es conveniente hacerlo en otoño para que las lluvias habituales en esta época favorezcan su crecimiento, aunque se puede realizar en cualquier estación, exceptuando el invierno.
La semilla de césped es muy pequeña y es importante sembrar una cantidad adecuada, no quedándose cortos, pero sin excedernos a riesgo de que pueda pudrir. Lo más conveniente son 25 ó 30 gramos por metro cuadrado en un suelo rico y bien preparado, si el terreno elegido para plantar nuestro césped no es muy fértil la cantidad se debe aumentar a 50 ó 60 gramos por metro cuadrado.
Es conveniente buscar un recipiente con capacidad para la cantidad exacta de semilla que vamos a sembrar por metro cuadrado, por ejemplo si por las condiciones del suelo hemos decidido poner 30 gramos por metro cuadrado de semillas de césped, buscaremos un recipiente que haga esa medida y una vez cuadriculado el terreno en metros cuadrados, lo cual se puede hacer con cuerdas y palitos, aplicaremos el contenido exacto de el recipiente sobre cada cuadrado, repartiendo las semillas de césped de la forma más regular que podamos, y si es posible con el suelo ligeramente húmedo. Una vez distribuida toda la simiente es fundamental rastrillar el suelo para que estas penetren en la tierra y se protejan así del viento y los pájaros.
Una vez el césped desarrollado, dará a nuestro jardín una preciosa base blanda, tupida, mullida y muy vistosa, que podemos complementar con todas aquellas plantas, flores, arbole, etc., que nos parezcan interesantes o bonitas, ya que la base de un buen y cuidado césped siempre dará una sensación de armonía y conjunto a nuestro jardín.